domingo, 14 de febrero de 2010

Mundos Posibles






Transitamos por un mundo extasiado por imágenes, la pornografía de la información, en la exterioridad solitaria y voyeurista. Un simulacro de la vida del ideal anhelado que discurre sobre la apariencia. Al ser proclives a la teatralidad de la bonitura es posible desvanecer al otro, pues ignoramos o somos capaces de ser indiferentes a la realidad misma de cada uno: cada uno de nosotros es otro . El otro soy yo: Historia, memoria, posible, futuro y presente. Si se desvanece el otro y lo que lo constituye, sus posibles y dimensiones, también el Yo, lo Uno, lo considerado “propio” se disipa, pues nos constituimos en la otredad... por la mirada. La mirada* y no el ver, que se realiza por razón de óptica, una función orgánica.


Habría que comprender, ante todo y sobre todo, que el ser es un infinito. Somos mortales y, a su vez, diversos, múltiples; diferentes voces, sonidos y silencios; tragedia y felicidad; dolor y goce... Proyecto, horizonte... Si logramos asumir, en primera instancia, ese potencial humano, nos aproximaríamos al sentido de la belleza desde lo que es: un modo de ser que se realiza más allá del sentido de la vista; es constituida por lo trágico, lo que en nuestro día a día consideraríamos feo, repulsivo, indeseable, como la desventura, el dolor, etc. La contradicción es un elemento innegable del ser que discurre en el tiempo, transita entre las cosas, como la estética también es un ser otro , un tiempo otro , una cosa otra .


Al referir a la palabra “estética” es cierto que se habla de una disciplina académica; implica el goce estético y razón, no simplemente percepción o el sentido de la vista. Habría que recordar o saber que está estrechamente relacionada con la realidad humana. Desde su nacimiento está ligado a cómo viven los seres en su tiempo, sin reducirlo a una actitud práctica sino sentimiento y entendimiento, mismos elementos que comprenden una palabra tan recurrida en el cotidiano: Sensibilidad. Es decir, una intervención estética significa (o debería de significar) también “ética”, pues el arte efectúa la problemática del sujeto, es enigma y espejo del individuo y la sociedad.


De este modo, se puede decir que se trata de la experiencia estética del hombre, una actitud que concierne a la experiencia en el mundo: Sensibilidad, entendimiento, contemplación, imaginación, razón, etc.; sin implicaciones personales que terminen por suplantar el sentido de las cosas. El contacto humano y la posibilidad misma del pensamiento son imprescindibles para la realización verdaderamente plena del ser humano y no convertir la alteridad (el otro, lo otro) en nada más que un espectro por el deseo de la ilusión estética, que es eludir la intervención ética.


La actividad creadora, reflexiva, las artes, entre otros elementos, están en nuestra vida, muchas veces sin darnos cuenta. Pero están, y la experiencia depende de una actitud, no de una condición racial, social, de género, etcétera.


Escher Print Gallery

Los modos de la realización de la experiencia estética son infinitos y los medios para aproximarnos a ésto son de diversa índole. Las artes o la cultura no siempre dependen de una gran inversión económica. Como redactora y editora de contenidos (noticiario), en un portal de difusión cultural , al recabar noticias diariamente sobre lo que acontece en la cultura y las artes, me he encontrado con diferentes opciones, eventos de diversos costos y también los gratuitos. De ese modo podemos hablar de una cultura ‘abierta', una puerta posible de cruzar con voluntad y actitud, entre otros factores prácticos.


El recorrer el panorama cultural, realizar una recopilación y el exponer sucesos, no es simplemente hablar de información, sino de procesos que atañen a todos, que nos incumben, aun cuando se considere como algo lejano; sobre todo, es recolectar posibilidades. Alimento para la mente, la imaginación, dar pie a la reflexión, en el pleno sentido de la palabra, en una de sus acepciones o significados en el diccionario, en el área científica de la física dice lo siguiente: “acción y efecto de reflejar o reflejarse”. Por lo tanto, quien crea que no es útil, ni práctico, ni vital nutrirse de artes, creaciones o asumirse como creador, en su singular y diversos modo de ser, no alcanza a vislumbrar que todo eso ya es parte constitutiva del mundo. Esa “acción y efecto de reflejar o reflejarse” nos ofrece herramientas de vida, medios para recrearnos y recrear la existencia, lo existente, el mundo.


"Cultura" es todo aquello que está; es el modo de ser de una sociedad; así que todos somos una parte de ése todo. Conformamos los posibles de este mundo, con nuestras acciones y lo que se sustrae a ellas, como el pensamiento, las ideas, entre otros, pero que se proyectan de un modo o de otro. Se conjuga la vida práctica y la estética. Lo lúdico, la sensibilidad, la imaginación, lo trágico... Las artes y vida cotidiana: Las artes que son síntesis de la realidad y la vida cotidiana que es una realidad con infinidad de posibles.



Momento fúnebre del capitalismo Juan O'Gorman

* “El ver se hace conforme con los objetos. El mirar lleva al sujeto adelante […] Al mirar, yo velo y (me) guardo: estoy en relación con el mundo, no con el objeto. Y es así como : en el ver, yo veo, por razón de óptica; en la mirada, soy puesto en juego. No puedo mirar sin que eso me mire, me incumba” [ Jean-Luc Nancy].



Mundos Posibles fue publicado, originalmente, en el portal Artes e Historia México, en la sección Especiales, (aproximadamente) el 30 de agosto de 2009. En Castillo de Ópalo lo presento con algunas modificaciones. Pocas pero con un lenguaje -más- libre.